Se espera que 2021 sea el año más fuerte de crecimiento del PIB mundial en más de dos décadas, ya que la vacunación masiva corta de forma permanente el vínculo entre el virus COVID-19 y la actividad económica. Este repunte está respaldado por una fuerte acomodación monetaria y un impulso fiscal mayor al esperado.
En su reciente actualización de perspectivas económicas, el Fondo Monetario internacional elevó el pronóstico de crecimiento mundial para 2021, basado precisamente en como el apoyo a las políticas y las vacunas aumentaran la actividad económica.
En concreto se prevé que la economía mundial crezca un 5,5% en 2021 y un 4,2% en 2022. El pronóstico para 2021 se revisa al alza 0.3 puntos porcentuales en relación con el pronóstico anterior.
Se proyecta que la fuerza de la recuperación variará significativamente entre países, lo cual no nos sorprende, porque sabíamos de antemano que quienes han tenido un mejor manejo de la pandemia y han hecho un mayor esfuerzo, sobre todo fiscal para compensar los efectos económicos de la pandemia, serían los que tendrían las mejores opciones de recuperación (caso US, China y en menor medida Europa) vs un Latinoamérica, por ejemplo, donde la excepción sería Chile.
En desarrollados destacaría la economía de EE. UU., que crecería un 5,1% en 2021 y es probable que la perspectiva mejore aún más si el Congreso de los Estados Unidos aprueba un paquete de ayuda de US$1,9 trillones propuesto por Biden, donde la economía americana vería un aumento del 5% en tres años si el paquete gana la aprobación.
Y en emergentes seguiremos contando con una economía China muy fuerte que se expandiría un 8,1% en 2021, mientras que la economía de la India crecerá un 11,5% en 2021.