El gobierno familiar no es meramente un proceso de toma de decisiones patrimoniales, es una herramienta poderosa para garantizar que el legado familiar no sólo sea financiero, sino también emocionalmente saludable y armonioso.
La nueva legislación chilena impulsa la innovación financiera y promueve la inclusión, pero su éxito dependerá de la implementación efectiva y los desafíos regulatorios para empresas y consumidores.