Octubre 13, 2023 - 2 min

Efectos secundarios: el impacto de la popularidad del Ozempic y compañía en los negocios y la economía

Las ventas de alimentos podrían verse afectadas por la proliferación de la nueva generación de medicamentos contra la obesidad.

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La nueva generación de medicamentos antiobesidad –formulados originalmente para el tratamiento de la diabetes tipo 2— saltaron de redes sociales como TikTok a los titulares de la prensa económica. Productos como Ozempic, Wegovy o Saxenda son objetos de deseo de millones de personas que buscan una forma sencilla para adelgazar, pese a su alto precio (US$1.400 mensuales en EE.UU. en el caso del Wegovy).

Estos medicamentos funcionan emulando los efectos de la hormona GLP-1, que naturalmente se libera después de comer y que actúa sobre el cerebro reduciendo la sensación de hambre y aumentando la de saciedad. Su uso en pacientes diabéticos ha permitido establecer un historial de seguridad en su consumo. Además del precio, otro problema es que deben usarse de forma permanente para evitar ganar peso nuevamente, según los estudios realizados hasta ahora.

La popularidad de estos medicamentos está teniendo efectos en la economía, más allá del aumento de volumen vendido –se estima que el crecimiento en sus ventas ha sido de 300% entre el 2020 y el 2022—y de la valorización de las acciones de los laboratorios –el precio de la acción de Novo Nordisk, uno de los principales fabricantes, pasó de unos US$23 en noviembre de 2018 a US$93 en octubre de 2023-. Walmart, que monitorea los hábitos de consumo de sus clientes, ha notado una leve disminución de las ventas de comida y de calorías en sus supermercados en Estados Unidos. Según Bloomberg, hace unas semanas el CEO de Kellanova, fabricante de los snacks Pringles y Cheez-Its, señaló que la empresa está estudiando el impacto del creciente uso de estos medicamentos en su negocio.

Sin embargo, no todo es negativo para estas empresas. En una entrevista con CNBC, el director financiero de Walmart señaló que los usuarios de estos medicamentos tienden a consumir más en sus tiendas, aunque compren menos comida.