Más conservadores en lo internacional, más pro-riesgo en lo local.
Seguimos recomendando sobre ponderar activos menos sensibles a las tasas, como efectivo, sectores value, acciones internacionales y activos reales.
Mayores tasas de interés ejercieron presión sobre las valorizaciones durante 2022, pero ahora el enfoque pasará de las valorizaciones a las utilidades corporativas, en un entorno macro cada vez más desafiante.
Los activos locales ofrecen una atractiva relación riesgo-retorno.
La pregunta importante que surge respecto a la política del Banco Central es hasta cuándo estará en pausa el ajuste monetario.
El mercado está empezando a dudar de que los bancos centrales a nivel mundial sigan siendo agresivos en la lucha contra la inflación a medida que aumentan los riesgos para la estabilidad financiera.