Nuestra visión para el segundo trimestre de 2023 es más cautelosa debido a las tensiones recientes en el sector bancario, que implican estándares crediticios más rigurosos y un mayor riesgo de recesión.
Nuestro mayor cuestionamiento es que un escenario de soft landing ya está en buena medida incorporado en los precios y no vemos muchas razones para que los activos de riesgo sigan subiendo, en medio de tasas más altas y el lenguaje todavía agresivo de varios miembros del FOMC.
La mayoría de los escenarios base para 2023 asumen o un soft landing o una recesión leve, bajo el supuesto de que la inflación se desacelerará de manera importante y que la tasa terminal de política estaría en el rango de 5,0% – 5,25%.
No debemos olvidar que, luego de resueltos los desbalances inmediatos, la capacidad de crecimiento de nuestra economía es muy baja.
Adiós acciones, hola efectivo.
Lo primero que tenemos que entender, es que la economía chilena se encuentra en un franco proceso de desaceleración, el que no comenzó este mes, sino aproximadamente desde fines del año pasado.
La curva de rendimiento de EE.UU. ha mostrado un aumento en la probabilidad implícita de recesión, en las últimas semanas.
El análisis de Humberto Mora, subgerente de inversiones de FYNSA
Evaluando los riesgos de Recesión en EE.UU.: Si efectivamente hubiera una recesión, ¿cómo sería?