Octubre 4, 2024 - 2 min

Visión y Estrategia Local

Los activos locales siguen ofreciendo una atractiva relación riesgo retorno

Comparte

El proceso de normalización monetaria por parte del Banco Central de Chile ha seguido su curso presupuestado, con la TPM ya en 5,5%. 

En tanto, en el IPoM de septiembre, el corredor de TPM en el escenario central para la tasa de interés, la diferencia en puntos base respecto al IPoM de junio es significativa, con una TPM que se ubicaría en promedio en torno a 50 puntos menos para 2025. En particular, la TPM a fines de este año se ubicaría 25 puntos menos que lo proyectado en junio, o sea 5,0% vs el 5,25% anterior. 

El escenario propuesto por el IPoM es noticia para la renta fija local. En efecto, las tasas base siguen cayendo, especialmente largas. A pesar de la caída en la parte corta media, la pendiente 2-5 sigue viéndose atractiva. Con estos movimientos, las tasas reales entre 2 y 3 años (que es la parte de la curva donde estamos posicionados en términos de duración) ya cotizan en niveles promedios para su historia. 

Seguimos esperando más inflación que el mercado —que en 2024 terminaría en 4.8% y 2025 en 3.8%—, por lo que mantenemos preferencia por una estrategia de corta duración y alta indexación a la UF, y muy buena calidad crediticia (AA). La mayor inflación proyectada aumenta la demanda por instrumentos reajustables en UF de plazos hasta 3 años, que es la mejor manera para “ganarse” la nueva inflación proyectada y con un menor riesgo de mercado, por lo que conservamos la preferencia por una estrategia de corta duración y alta indexación a la UF y muy buena calidad crediticia. 

Por lo demás, una duración en torno a 3 años debería ser —en nuestra opinión— el “receptor natural” del OW en intermediación financiera (depósitos a plazo y money market) que el mercado exhibe todavía; a la vez, recomendamos una transición gradual a activos de mayor riesgo. 

Para la renta variable es bienvenido un mayor alivio monetario, aunque el desempeño de las acciones locales dependerá también de cómo evolucionen los mercados internacionales y especialmente emergentes. Más allá de eso, lo que debiese ocurrir es una consolidación de los liderazgos sectoriales de los últimos meses, con sectores más sensibles a tasas de interés y ligados al ciclo doméstico, especialmente bancos, retail, y real estate. 

Ahora bien, los recientes anuncios de estímulo monetario y fiscal por parte de China deberían también contribuir a un mejor desempeño del sector de commodities. 

Seguimos pensando que las acciones chilenas ofrecen una atractiva relación riesgo retorno, con un entorno de tasas de interés más amigables en adelante, una mejora de las ganancias corporativas y valorizaciones altamente descontadas. 

De cara a lo que resta de 2024 —y ya pensando más en 2025—, deberíamos contar con algunos drivers más alcistas para las acciones locales: 

  1. Un mayor margen para una mayor flexibilización monetaria. Esperamos que la tasa de política monetaria finalice 2024 en 5,0%, por debajo del 5,5% actual, y convergiendo a una tasa neutral en torno a 4,25% a fines de 2025. 
  2. Una mejora en las ganancias corporativas para este año y el próximo. Crecimiento de las utilidades de 5,4% durante 2024 y 21,9% en 2025 (24,8% y 9,3%, respectivamente, al aislar a SQM). 
  3.  Valoraciones altamente descontadas. Con el IPSA cotizando a ~9x P/U fwd 12M, un descuento del 30% respecto a sus promedios de los últimos de 10 años. 

Finalmente, la tendencia del tipo de cambio seguirá siendo alcista mientras los diferenciales de tasas se sigan inclinando hacia el dólar. 

Para más información, consulte el informe adjunto.

Humberto Mora

Subgerente de Inversiones Finanzas y Negocios Corredora de Bolsa